El packaging tiene que convencer, eso está claro, pero además dentro de sus funciones primordiales está la de salvaguardar la integridad del producto que envuelve, manteniendo sus propiedades organolépticas en el caso de un alimento, o conservando su estado de conservación y funcionalidad. Pero además, debemos asegurarnos de que absolutamente nadie ajeno al proceso de producción ha manipulado el packaging o su interior, una misión que corresponde en muchos casos a los precintos de seguridad. De ahí su importancia en la seguridad del packaging
¿Qué son los precintos de seguridad?
Los precintos de seguridad son esas tiras situadas en la abertura de un producto para asegurar que este no se abre sin autorización (podría ser por accidente o deliberadamente). Para algunos packagings en concreto, pueden venir hasta numerados y con una leyenda informativa, de forma que se garantiza la exclusividad del producto dentro de una gama o lote. Una vez colocado el precinto de seguridad, este no puede retirarse sin ser destruido, garantizando que lo que llega a tu hogar no ha sido alterado. De esta forma, aseguramos la integridad y custodia de dichos bienes.
Podemos encontrar precintos de seguridad en muchísimos productos: bebidas alcohólicas, tabaco, medicamentos, alimentos de alto valor (frescos o envasados), entre otros. Asimismo, también sirven para asegurar el cierre de cajas, contenedores, camiones, sacos… evitando aperturas imprevistas, manipulación o incluso robo, para garantizar la calidad y la seguridad en el manipulado de botellas de vino o el sellado de productos farmacéuticos.
En el mercado podemos encontrar distintos modelos de sellado de seguridad, como el precinto de plástico o de metal, pudiendo ser reutilizables o de un solo uso. Normalmente, mientras que los empleados para alimentación suelen ser desechables, los de alta seguridad suelen usarse para transporte a gran escala, requiriendo incluso cizallas para su rotura.
Si tienes interés en incorporar precintos de seguridad en tu producto para salvaguardar su integridad, garantizar su autenticidad y la no manipulación cuando llegue al cliente, consúltanos para encontrar la mejor fórmula posible para conseguir un packaging seguro. Sin duda, un precinto de seguridad aporta un toque de seguridad y distinción que puede marcar la diferencia.