¿Cómo customizar un producto en base a lo que el cliente te pide?

Una de las funciones clave del packaging es la personalización, y es que aunque veamos dos productos teóricamente iguales en el stand del supermercado, la imagen que podemos tener de ellos puede ser diametralmente opuesta: uno nos puede evocar rebeldía, libertad, compromiso, salud… mientras que el otro puede transmitirnos lo contrario o peor aun, no decirnos absolutamente nada. Y ojo, que no hablamos de un coche: la magia de la publicidad es tal que podemos referirnos a un simple refresco.

Es la magia de la diferenciación de la competencia o cómo dos productos a priori similares pueden despertar emociones tan diversas. Y es que no lo olvides, el packaging transmite el ADN de la marca  desde el primer vistazo.

Al margen de la imagen de marca y la publicidad – que dan por si mismos para una serie de posts – , el packaging permite una customización brutal, desde el tipo de soluciones empleadas como pueden ser sleeves o blisters clásicos o apostar por otro tipo de envasado personalizado más arriesgado dentro de las últimas tendencias, como puede ser las soluciones ecológicas reutilizables o directamente, el último grito en innovación aunando tecnología y diseño. Sólo con la elección del tipo de packaging podemos evidenciar conceptos tan diferentes como que apostamos por el medio ambiente, que damos valor a lo tradicional y rústico o que miramos al futuro.

Pero al margen de la elección de un tipo determinado de tipo de envasado, la customización de un producto puede ir mucho más allá mediante el empleo de packaging colorido y llamativo o un etiquetado estacional aprovechando eventos tan variados como la Navidad, San Valentín o incluso las vacaciones estivales. No hace falta volverse locos, a veces con emplear un diseño original, con la tipografía y los colores adecuados pueden lograr el efecto deseado.

Así que si quieres que tu packaging sea una extensión más de tu producto o tu compañía, en Stylepack  sabremos cómo hacerlo.