Cada vez son más las empresas que apuestan por la sostenibilidad como estrategia de producción: ser más eficientes, consumir menos recursos y mostrar a sus clientes el compromiso con el medio ambiente. Es cierto que la ley invita a ello, pero la apuesta por la inversión en innovación es clave para una transición ecológica competitiva. Uno de los últimos proyectos más interesantes en esta materia es el de Pescanova.
La novedad: Un packaging de residuos plásticos reciclados
La firma, toda una referencia en congelados y ultraprocesados de pescado, usará residuos plásticos procedentes de playas y zonas costeras para un reciclaje avanzado y su posterior conversión en packaging. Para esta misión cuenta con la empresa química Sabic, especializada en la producción de polímeros circulares certificados.
Un ambicioso plan que tiene tres líneas de acción ecológicas: la limpieza de los mares y océanos por un lado, dar una segunda vida a deshechos y, en consecuencia, la reducción del consumo de materias primas.
Este proyecto comenzará en el segundo trimestre del año empleando plásticos recogidos en cauces fluviales y zonas costeras a 50 kilómetros a la redonda de sus plantas. El packaging producido se empleará para algunos de los productos de la propia firma, en cuya composición habrá un 90% de estos materiales reciclados.
Con esta iniciativa, la empresa tiene la intención de recuperar 10 toneladas de desechos plásticos, en su mayoría de gran volumen, evitando así que se deshagan y lleguen al medio marino, donde sus efectos son gravísimos tanto en la flora como en la fauna.
El CEO de Pescanova explica que la meta de esta operación es que en 2025 el 100% de sus embalajes sean reciclables y se enmarca dentro del Programa de Sostenibilidad “Pescanova Blue”, donde se documenta su plan de acción y actuaciones a lo largo de la cadena de valor de la empresa, esto es, la pesca, el cultivo, la producción y la comercialización.