Lo eco ha llegado para quedarse en nuestra sociedad y por supuesto, la industria no se ha quedado atrás. Sin ir más lejos, el packaging renovable ya es una realidad que sigue creciendo día a día, alentada tanto por una sociedad cada vez más conciencia en el respeto hacia el medio ambiente, unos recursos cada vez mas escasos y una legislación que comienza a mirar con preocupación la contaminación y sus terribles consecuencias para el mundo en el que vivimos.
Así, cada vez más empresas se suman a plan de acción de usar envases renovables. Marcas como Häagen Dazs o la multinacional Nestlè ya han dado los primeros pasos en este sentido comprometiéndose a modificar su packaging en un futuro cercano para seguir siendo competitivos y referentes en su sector, y al mismo tiempo mostrar su compromiso hacia el medio ambiente.
Con unos hábitos de consumo versátiles y elevados, fruto de una sociedad individualista y pragmática, se antoja más necesario que nunca apostar por el packaging renovable, de modo que podamos satisfacer las necesidades del consumidor y al mismo tiempo cuidar del entorno. Así, certificaciones como la de los envases PEFC demuestran que el material empleado no solo es más respetuoso con el medio ambiente, sino que sus orígenes ofrecen garantía de sostenibilidad.
Además, es tecnológicamente viable, habida cuenta del desarrollo y crecimiento de materiales menos perniciosos para el medio ambiente, biodegradables y/o reutilizable. El objetivo es claro: reducir residuos y, en caso de generarlos, que sean fácilmente recuperables y reutilizables.
La sostenibilidad en el packaging será un factor clave en los próximos años, en Soluciones Packaging no nos cabe la mejor duda. Y si algunas grandes empresas ya han comenzado a erigirse como referentes en todo esto, logrando una posición diferenciada, poco a poco cada vez se irán uniendo empresas pequeñas y medianas. El futuro del packaging es renovable, ¿te unes?
