Quizás sea una costumbre con poco arraigo en nuestro país, pero Halloween va ganando adeptos año a año. Y es que, ¿qué mejor excusa que celebrar un puente que disfrazarse y tuneaar un poco nuestros espacios? Y si lo hacemos con nuestra ropa, hogares y comercios, ¿por qué no ir un paso más allá y aprovechar esta ocasión especial para vestir nuestros productos con el packaging más terrorífico?
Diferenciarse es clave para llamar la atención, una máxima aplicable a la vida y el packaging de productos. Más allá de campañas publicitarias, la toma de decisiones en lugares como el pasillo del supermercado tiene lugar en cuestión de segundos, un lapso de tiempo breve en la que los impulsos ganan peso. Aprovechar la estacionalidad para modificar el packaging es una medida inteligente y efectiva para aumentar las ventas y Halloween no es una excepción.
Además Halloween cuenta con un efecto especial: es una festividad con escaso arraigo pero muy potente, especialmente entre los jóvenes. Por este motivo, el packaging de Halloween cobra especial importancia en productos dirigidos a los más jóvenes: refrescos, gominolas, dulces y caramelos…
La importancia del packaging de Halloween en productos para los más jóvenes
No es casualidad que los mejores ejemplos se encuentren en productos cuyos consumidores se encuentren entre este segmento de la población. Además, aportar ese toque desenfadado y terrorífico demuestra cuidado por los detalles e interés por la actualidad.
El packaging de Halloween es un buen momento para demostrar nuestra creatividad y probar cosas nuevas, si bien los colores y diseños están claramente designados: tonos oscuros y rojizos, calaveras, calabazas, vampiros o brujas reinan en la noche más oscura y terrorífica del año.
Finalmente, Halloween es una oportunidad para aumentar las ventas en este tipo de productos simplemente entendiendo el sentido de la fiesta del «¿truco o trato?» en la que se reparten caramelos. En este sentido, algunas casas de dulces aprovechan la ocasión para crear productos con formatos de packaging especiales para la ocasión con dosis más pequeñas para poder repartir.