La gestión de residuos generados por el packaging es un serio problema ambiental, por eso es tan importante que desde la propia industria se busquen soluciones sostenibles a través del reciclaje, la reutilización o incluso como esta de Nakedpack de la mano de Naama Nicotra, con un packaging comestible procedente de algas que proporcionan una experiencia diferencial y por supuesto, respetuosa con el medio ambiente.
El agar-agar es una sustancia comestible cuyo origen procede de las algas. A partir de este material el diseñador Naama Nicotra ha desarrollado una serie de packaging alimentario y soluble. Su nombre es NakedPak y explora la idea de volver a las soluciones naturales y sostenibles usados hace siglos, pero sustituyendo el plástico y el papel.
La fórmula de Nicotra parte del agar agar para producir una especie de bioplástico transparente e insípido que puede manufacturarse como una lámina o una estructura tridimensional. Además, durante el proceso de fabricación pueden añadirse salsas o especias que le producen sabor, un punto importante teniendo en cuenta que se disuelve en agua.

Seguro que no es la primera vez que coges una manzana del frutero, la frotas un poco y le das un mordisco. Pues bien, NakedPak desafía ese principio de tener que lavar o al menos frotar los alimentos que te vas a comer crudos ya que te lo puedes comer tal cual, eso sí, una vez lo metas en agua para que recupere sus propiedades organolépticas y textura.
Por el momento NakedPak llega con cinco sabores de cinco platos diferentes, pero este packaging de bioplástico puede adaptarse a otras muchas recetas. Cada una contiene las especias y sabores que te harán emular preparaciones tan reconocibles como helado, spaghetti, arroz al curry o sopa. De hecho, la sopa está hecha con vegetales que recuperan su forma original una vez los sumerges en agua. Los spaghetti por ejemplo van recubiertos con salsa de tomate y recuperan toda su esencia a meterlos en agua caliente.
El proyecto de NakedPak marca el camino de integrar procesos sostenibles desafiando al consumidor y su comportamiento para reducir el packaging y al mismo tiempo servir como snack. Sin duda, el Packaging comestible es una de las tendencias que veremos cómo crece en los próximos años.
Vía | Naama Nicotra