Todo cambia, los temas sociales, la demografía, la política… y todo hay que actualizarlo para que perdure.
Si bien los cambios normalmente se hacen para mejorar una parte del producto, normalmente la dirigida al cliente, también se producen cambios que afectan al diseño en cuanto a reducción de costes, de residuos… Todos los cambios que pueden realizarse en otros entornos como son la moda, la arquitectura, el diseño gráfico no son más que adecuaciones al entorno, pero ¿por que se llaman tendencias?, ¿a caso hay quien sabe por dónde van a ir los tiros?, supongo que alguno habrá pero los cambios a estética que se producen van más a tono con los sentimientos generales, sólo algunos más sensibles son capaces de verlos, sentirlos y transmitirlos.
No es de extrañar ahora que lo vintage se venda bien, nos transmite recuerdos de épocas que tenemos bien valoradas, lo transformamos inconscientemente en atributos como tradicional, calidad… de eso trata el diseño, pero sólo se trata de transmitir esos factores a través de necesidades, necesidades que en este caso vienen dadas por la disconformidad social, por los tiempos revueltos en que vivimos, por la necesidad de felicidad generalizada. La evolución de las marcas, la creación de nuevas, todo tiene que salir al mercado o mantenerse en el mercado con su cuota, en el mejor de los casos mejorarla, eso es lo que aporta el packaging, el diseño.
Mirando un poco las necesidades del mercado, es decir del cliente y de la situación de la competencia, debería resultar fácil encontrar una mejora o un cambio en el diseño de casi cualquier producto par poderla introducir en el mercado. Desde dosis mas individuales o más pequeñas, a mayor superficie de comunicación, una mejor exposición del producto… hay infinidad de posibilidades, casi tantas como productos, pero eso sería una locura a nivel de producción, por lo que la participación del diseño gráfico al diseño industrial aporta diferenciación dentro de un mismo concepto.
Hablemos un poco de los envases individuales.
Una de las ventajas que se nos presenta es el concepto de para llevar. Ya con estos dos conceptos estamos recogiendo dos necesidades impuestas por la sociedad actual. La primera, individual, no es de extrañar, las casas cada vez gozan de menos miembros, el individualismo es cada vez mayor, diferentes horarios… ya estamos recogiendo una buena parte de la población. En segundo lugar tenemos el concepto para llevar, obviamente si hacemos envasados mas individuales, al final son monoraciones, y que mejor que esto unido a los estilos de vida actuales, las prisas, el almuerzo en el trabajo… poderlo tener para llevar nos va a facilitar un poco la vida, esa que tanto nos estamos complicando. Lo de saludable ya lo trataremos a parte.
¿Donde podemos mirar para ver estas tendencias? Obviamente podemos verlas en sociedades que si bien no considero mas evolucionadas podrían tratarse de mas avanzadas, en esto me refiero a que vamos siguiendo sus pasos, véase en Estados Unidos, cada vez las raciones individuales son más vendidas, se consumen en casi cualquier sitio, en el coche, en la oficina… El 20% de los alimentos en EEUU se consumen en soportes de embalaje para llevar.
Así pues la adecuación del packaging/producto está claro, el packaging debe incorporar ciertas ventajas y ser móviles, estructurarse en pequeñas raciones e individualizables. Con esto la sensación del cliente va a mejorar ya que por un lado se lo puede llevar a su día a día y por otro, no se le pasan los alimentos generando un malestar moral y económico. La individualización del producto lo encontramos en todos los consumibles, sean raciones por si solas o parte de uno mayor… miremos las estanterías de la nevera: loncheables, hueveras de 6 unidades frente a las de 24 unidades que compraban nuestras madres… unidosis de todo tipo (Ketchup, mostaza, salsas, snacks…) de hecho los lineales de los supermercados cada vez ofrecen más espacios a estos productos que a los familiares, cereales para un desayuno, ensaladas para llevar… fríos, frescos, congelados… de todo tipo. Pero si ganan espacio en los lineales es porque lo ganan en nuestros hogares.
Las líneas de los packaging toman necesariamente nota y se hacen mas ergonómicas, ligeras y transportables. Alimentos que pueden estar más tiempo fuera de la nevera, otros que ya ni lo necesitan… además hay que transmitirlo, publicidad, diseño gráfico aplicado, nuevas asociaciones de colores para lo natural, lo ecológico, lo individual….
Otro mercado de tendencias, las compras online.
Ya no sólo tienen que llamar la atención los productos en el lineal, deben de quedar pocas personas que no hayan realizado ya algún tipo de compra por medio de la Web, algunos quedan… pero que en nuestro país la compra por catálogo ha funcionado muy mal y más si lo comparamos con EEUU, algo debieron de hacer mal al principio los vendedores, no dar la calidad o el servicio esperado, problemas de devolución… hoy en día se tienen prácticamente las mismas ventajas por Internet que en las tiendas… más si son productos conocidos ya no queda ninguna duda de cómo ser el producto y ver si cumple las expectativas…
Volvamos por un momento al packaging… si bien hay más métodos para atraer la acción del cliente a la compra online de un producto en el propio entorno, la decisión final de compra se realiza cuando la relación calidad precio es buena…. Eso no ha cambiado, ¿pero como demostrar la calidad en productos que no vemos realmente? Pues evocando ciertos elementos que residen en nuestras mentes y que llaman a la calidad… Añadir ciertos elementos al packaging y transmitirlos online hacen que el cliente se crea que lo que queremos decir es lo que va a hacer… por ejemplo, si en la foto que vemos de un producto como puede ser el pan, el queso… le disponemos de agujeritos bien puestos para que al apretar delicadamente el estuche, este desprenda el olor de lo tradicional… pues ya lo estamos oliendo, si nos lo dicen y lo vemos… blanco y en botella.
Tendencias sensoriales, tanto al tacto como al olfato, hay que tener en cuenta también estas tendencias.
Al final de lo que se trata es de permitir al consumidor interactuar con el envase, acercar al cliente a nuestro producto, pero eso sí, por muy bueno que sea el packaging, si luego el producto no da la talla, el producto no mantendrá lo que se buscaba, si el producto es, vamos a decir bueno o correcto, las ventas podrán aumentarse.
Otra tendencia basada en la individualidad es el concepto de único y/o personalizados.
La personalización de los productos es cada vez mas posible también debido a las tecnologías, pero es que estas también se crean en base a tendencias… entonces ¿quién marca tendencias?… generalmente las marcan los comportamientos generalizados, la industria siempre tirará hacia donde mas gente vaya y dará con soluciones que atraigan a cuanta mas gente mejor… luego hay algo que hace cambiar a esa masa por una necesidad real o bien por la creación de una opción que ha gustado mas… pero esto realmente es haber visto una necesidad generalizada, así que nuevamente las tendencias las marcamos la inmensa mayoría.
Para acabar vamos a mirar otra tendencia que nace seguramente de todas las anteriores, ¿cuál es el destino de todos estos envases que hemos sacado a la venta? ¿qué pasa con los recursos naturales y la contaminación? Pues ahí tenemos otro nicho… lo ecológico, lo reciclable, lo sostenible…. Y aquí el packaging juega un gran papel, ya que aporta a nuestras basuras un porcentaje cada vez mayor… si mirásemos la basura al final del día veríamos que gran cantidad de embalajes usamos… la mayoría es packaging, envoltorios de un tipo u otro… si hasta la fruta nos viene pelada…
Así pues, vamos a tratar el verde, el embalaje sostenible… esto ya hace años que se está viendo, no es de ahora pero sigue siendo una tendencia y si bien ya hay partes legisladas, otras veces son argumentos para la venta del producto… además si el embalaje es eco… ¿por qué no va a ser lo de dentro? Pues eso que tiene la publicidad… la asociación de ideas es lo bueno que tiene para vender y lo malo que a veces puede ser para nuestro organismo, pero bueno… el planeta lo nota aunque tú no.
Una manera también de ser más sostenible no solo es en cuanto a los materiales usados, sino al espacio que estos ocupan una vez usados… ¿os acordáis de cómo eran las botellas? Si no os acordáis no os preocupéis… simplemente que no se doblaban como ahora, que sus paredes eran mucho mas gruesas y que el material no era reciclable, a veces incluso se habló que si era nocivo, mas concretamente se habló de cancerígeno…
En conclusión, será tendencia todo aquello que nos facilite la vida, el estilo de vida que la gente quiere llevar, hacer cambiar ese estilo de vida depende de tantos factores que es imposible que nadie diga que esto va a ser así para que eso lo sea, lo que si es posible es que observando a la gente, sus necesidades, metiéndonos en su pellejo, o si somos parte de la mayoría, también el nuestro, y pensemos como podemos mejorar sus/nuestras vidas.
